Kobe Steel dice que la presión financiera y falta de control motivaron el falseo

La metalúrgica japonesa Kobe Steel dijo hoy que la presión por obtener una mayor rentabilidad de sus finanzas y la falta de control por una organización insuficiente fueron algunos de los factores que motivaron el falseo de datos en sus productos.

Tokio, 10 nov (EFE).- La metalúrgica japonesa Kobe Steel dijo hoy que la presión por obtener una mayor rentabilidad de sus finanzas y la falta de control por una organización insuficiente fueron algunos de los factores que motivaron el falseo de datos en sus productos.

Así lo reveló el presidente de la compañía, Hiroya Kawasaki, en una rueda de prensa en la que afirmó que el conglomerado "ha buscado demasiado la rentabilidad" y que también pecó de falta de "balance" en la administración de las fábricas y de "poca conciencia" a la hora de cumplir con los requerimientos de calidad de sus clientes.

La siderúrgica se encuentra en entredicho tras revelar que datos técnicos de al menos 18 de sus productos de aluminio, acero, cobre, limaduras de hierro y materiales de pulverización catódica -usados para la producción de pantallas de cristal líquido- fueron alterados y que algunos empleados habrían encubierto esta práctica.

El falseo consistió en la manipulación de los certificados de las inspecciones de algunos productos, que fueron reescritos para hacer que los datos técnicos cumplieran las especificaciones solicitadas por sus clientes, cuando no era así.

Kobe Steel identificó las motivaciones del falseo en la investigación interna iniciada tras admitir la manipulación el pasado 8 de octubre y cuyo informe presentó hoy al Ministerio de Economía, Comercio e Industria.

La tercera mayor siderúrgica nipona detalló sus medidas para evitar una recurrencia de irregularidades, entre ellas la automatización de las bases de datos de la revisiones de producto, para prevenir la manipulación manual, y una revisión de objetivos, para garantizar que las plantas no acepten pedidos excesivos.

Ni Kobe Steel ni 474 de las 525 compañías que recibieron los productos falseados han detectado hasta ahora problemas de seguridad en ellos, según los últimas cifras facilitadas hoy por la acería.

Entre las empresas afectados hay fabricantes automovilísticos locales como Toyota, Nissan, Honda, Mazda y las estadounidenses General Motors y Ford, y compañías de sectores que van desde el aeronáutico y el ferroviario hasta el de equipamiento militar.

Se espera que Kawasaki y otros directivos aclaren a finales de año si dimitirán por el escándalo -el último de una serie de fiascos protagonizados por importantes empresas japonesas-, coincidiendo con la presentación de los resultados de una investigación externa.